Hoy queremos compartir un par de imágenes obtenidas durante el rodaje de dos de las películas que nos van a acompañar en este viaje llamado GENERAMMA 2023.
La primera se tomó en un instante del rodaje de 20.000 especies de abejas, de Estíbaliz Urresola, y en él aparece la directora acompañada de su actriz protagonista, Sofía Otero, quien obtuvo el Oso de Plata a Mejor interpretación en la pasada Berlinale; la segunda, congela un momento durante la grabación de Secaderos, de Rocío Mesa, junto a la actriz Vera Centenera.
Ambas fotografías conmueven porque son la prueba fehaciente de que sin mujeres no hay cine y porque demuestran que, sin mujeres, no hay un cine capaz de retratar nuestras vidas, nuestra sensibilidad y nuestras formas de ver el mundo.
Ambas fotografías conmueven, además, porque en ellas se produce un diálogo intergeneracional entre directoras adultas, que conocen muy bien todo lo que han tenido que pelear para que su mirada llegue a la gran pantalla, y actrices niñas, que no solo actúan interpretando papeles diversos, sino que además crecen teniendo como referentes a mujeres que son cineastas y que les dicen que ellas también pueden serlo.
